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Lorenzo Córdova ha buscado interlocución con la 4T, pero le han cerrado las puertas
El consejero presidente del INE afronta las consecuencias de diversos desencuentros con el Ejecutivo Federal y su partido, Morena.
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Por varios frentes, los roces entre la 4T y el Instituto Nacional Electoral (INE) se han dejado sentir en otros ámbitos, como el legislativo. Desde hace meses, Morena alista una reforma electoral en la que se buscaría adelgazar la infrestructura del INE, así como bajar sus gastos y darle más trabajo, al organizar por completo los procesos comiciales en entidades federativas.
El proyecto ha estado en manos del diputado morenista Sergio Gutiérrez Luna, quien es nada menos que el suplente de Horacio Duarte, subsecretario de Empleo de la Secretaría del Trabajo, y quien fuera el representante y operador principal del presidente López Obrador en el INE (antes IFE) desde la elección del 2006 hasta la del 2018.
Fuentes confiables revelan que Lorenzo Córdova, consejero presidente del organismo electoral, lo ha buscado para que le ayude a concretar una cita con López Obrador en Palacio Nacional. También ha recurrido a un personaje clave en la lucha anticorrupción, a fin de solicitar ese encuentro con el mandatario, pero nada: las puertas permanecen cerradas.
QUIEREN PRESIDENCIA ROTATIVA
Esto sucede mientras ya se registró el martes 26 una iniciativa del diputado Gutiérrez, respaldada por 126 diputados de Morena, el PT, Encuentro Social y el PVEM, que propone que la presidencia del INE sea rotativa cada tres años, en lugar de los nueve años actuales, y que el nombramiento lo haga la Cámara de Diputados, lo que podría dejar a Córdova fuera de la jugada.
Esta iniciativa prevé que en marzo próximo, a propósito de la conclusión del periodo de cuatro consejeros electorales, Benito Nacif, Pamela San Martín, Marco Antonio Baños y Enrique Andrade, inicie la nueva disposición y se nombre a quien relevaría en la presidencia a Lorenzo Córdova, quien así vería recortado su periodo, que empezó en 2014 y debería terminar en 2023.
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Esta jugada cambiaría totalmente la correlación de fuerzas que hoy existe en la mesa de dirección del árbitro electoral. Habría un nuevo presidente y cuatro consejeros más designados por esta legislatura en la que Morena, con su mayoría, logra aprobar cualquier reforma o nombramiento.
En la actual integración, Morena sólo cuenta con un consejero afín, quien es el único que se opuso a la multa, que finalmente el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) revocó, por el famoso fideicomiso “Por los Demás” y que se ha enfrentado a sus compañeros por defender la reducción presupuestal al INE, José Roberto Ruiz Saldaña. Sumarían 6 de los 11 consejeros que deberán conducir la elección intermedia del 2021, clave para la continuidad del proyecto de la 4 T.
En el caso de Lorenzo, el mensaje es claro, no logrará que lo reciban en Palacio Nacional y conservar la presidencia del INE si no cambia de actitud y envía señales distintas. Por ejemplo, en el tema de la austeridad, podría desistirse del amparo que promovió para evitar merma a su sueldo; cambiar el discurso de que se pondrá en riesgo la organización democrática de los comicios y acceder al ejercicio de un presupuesto menor con las mismas responsabilidades, o más, para el Instituto que, en aras de ser justos, goza de un destacado prestigio internacional.
CAPÍTULOS DEL DESENCUENTRO
Ya cuando Andrés Manuel López Obrador había ganado la elección del 1 de julio del 2018, con la histórica ventaja que le dieron los 30 millones de mexicanos que votaron por él, había un asunto pendiente de resolver en el Consejo General del INE. Era una queja por el supuesto uso indebido de recursos provenientes del Fideicomiso “Por los Demás”, que Morena había constituido para ayudar a los damnificados por los sismos de septiembre de 2017.
El instituto encabezado por Lorenzo Córdova impuso una multa de 197 millones de pesos. La Unidad de Fiscalización, que controlaba y sigue controlando Ciro Murayama –el más cercano consejero del presidente del INE–, hizo la investigación y presentó el proyecto para sancionar a Morena. La resolución explicaba que destacados militantes de Morena integraron el Comité Técnico del Fideicomiso de manera indebida y que no había claridad en el destino de los recursos –78.8 millones de pesos– con varios depósitos en efectivo atípicos, lo que dejaba entrever un posible financiamiento paralelo en su campaña.
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La dirección del fideicomiso coincidía con la sede de Morena. De inmediato, el entonces presidente electo calificó la multa del INE como una “vil venganza”, rechazó cualquier irregularidad y hasta mostró públicamente depósitos que hizo al Fideicomiso. En ese entonces lanzó la advertencia en el sentido de que deberá buscarse un esquema para quitar la facultad al Congreso de nombrar a los integrantes de organismos autónomos que terminan cooptados por los partidos políticos.
Sin embargo, las diferencias continuaron. El programa de austeridad del gobierno de la 4T y la reducción del presupuesto para el INE también han provocado encontronazos. Lorenzo Córdova ha defendido la necesidad de contar con suficiencia presupuestal, porque el INE no sólo se encarga de organizar elecciones federales, sino también de ayudar en comicios locales, hacer el monitoreo de radio y televisión más extenso a nivel internacional y de expedir el principal instrumento de identificación para los mexicanos: la credencial de elector.
Además, Córdova logró garantizar dos años más del seguro de gastos médicos mayores para trabajadores que gozan de esta prestación y que en algunos casos verían interrumpidos sus tratamientos en caso de retirarse, con serias afectaciones a su salud y la de sus familias.
@emeequis