Sepultureros, un eslabón más en la pérdida de cuerpos en los panteones

EMEEQUIS.– Las irregularidades dentro de los panteones  de la CDMX son un tema que cada día es más evidente. La profanación de tumbas no es un hecho desconocido para la población mexicana. EMEEQUIS ha seguido el caso de las hermanas Alma y Elisa Aguilar, quienes expresan que el panteón San José Iztacalco desconoce el paradero de los restos de su padre, Guillermo Aguilar. Dentro de la investigación, el panteón ha dejado entrever que mantiene más de una denuncia debido a la “desaparición” de restos óseos dentro del recinto.

La desaparición de cuerpos dentro del panteón encadena una serie de irregularidades que están relacionadas con la venta de huesos en el mercado negro, profanación de tumbas para rituales y una incorrecta administración; que tienen como consecuencia que en la misma fosa se entierre a más de una persona antes del debido tiempo para desocupar el lugar.

NO SABEN SI EL CUERPO DE SU PADRE SIGUE EN EL PANTEÓN 

Las hermanas Aguilar han tenido que enfrentar a las autoridades del panteón en la búsqueda de información para saber si los restos de su padre aún están dentro o si de alguna manera han sido profanados, como previamente lo ha documentado este portal.

Elisa Aguilar relata en entrevista para EMEEQUIS que, en la zona donde antes se encontraba enterrado su padre, ahora, hay una nueva tumba, pese a que su contrato con el panteón aún no termina y al solicitar información de quien había creado la nueva tumba, le comentaron que los sepultureros eran “voluntarios”.

SEPULTUREROS VOLUNTARIOS

Tanto a Elisa como a Alma, el panteón les informó que no existía un registro oficial del sepulturero que había construido la nueva tumba, también les expresaron que los restos de su padre no podrían estar dentro de la bodega donde los guardan los restos que sacan por “error”, pese a que en primer instancia la administración les dijo que podían estar ahí.. Por lo cual, las hermanas comenzaron a buscar con los demás trabajadores del panteón al responsable de la nueva tumba.

Dentro del video que comparte Alma, se puede observar que la bodega está llena de cajas de archivo, herramientas, bicicletas, dos ataúdes, una figura de Spiderman  y bolsas negras. Además, se encuentra llena de polvo, entre otras cosas. En el audio se puede escuchar “Y ¿Aquí tiene los restos de personas, todas estas cajas?” a lo que otra voz contesta que sí. 

Las supuestas bodegas donde guardaban los restos que sacaban por “error” es un cuartucho donde sólo hay escombros y dos o tres bolsas negras: Alma Aguilar Funes. 

“El Chino”, uno de los sepultureros, confirmó la información. Él les explicó que no todos los sepultureros son de base, muchos de ellos son considerados “voluntarios”, por lo cual, el panteón no les paga, su salario depende del trato al que lleguen con los familiares de quien ha muerto.

“El  Chino” explicó que es difícil localizar a estos voluntarios y agregó que: “Ellos no eran responsables, sino los administradores” de que las tumbas fueron profanadas.  “Él nada más hacía lo que le ordenaban, que era sacar huesos, ponerlos en una bolsa negra y entregarlos a la administración”, explica Elisa.

“El Chino”, de acuerdo a lo mencionado por Alma, mencionó que la administración es quien guarda los restos óseos en la bodega, el uso que se les dan a estos huesos es desconocido. 

Siguen sin saber dónde están los restos de su ser querido. 

ES PROBABLE QUE HAYAN SIDO VENDIDOS

Ante los cuestionamientos de Elisa sobre las posibilidades de que los restos de su padre hayan terminado siendo vendidos, ella comenta que las autoridades le dijeron: “Pues sí, desafortunadamente puede que algo así le haya pasado a los restos de su padre”, además en la fiscalía a Alma le recomendaron ratificar su denuncia y no “dejar” el caso, pues ya había aproximadamente 20 denuncias en contra del panteón por profanación.

Cuando las hermanas se enfrentaron a la administración del panteón, ellos les explicaron que ahora existía una nueva administración, la cual dijo: “No era responsable de lo que había ocurrido anteriormente”.

Para Elisa, revivir este proceso en el que no sabe dónde quedó el cuerpo de su padre es revivir su luto: “Es revivirlo, esta situación te lleva a revivir esas cosas”. Agrega que ella y su hermana se han visto afectadas emocionalmente y que dentro de todo el proceso, la fiscalía no les ofreció atención psicológica, como es debido. 

EMEEQUIS consultó al doctor en Derecho Miguel Ángel Granados Atlaco sobre la perspectiva jurídica de la profanación de tumbas. Él explica que el caso de la profanación se refiere a conductas sobre restos humanos que pertenecen a una persona. Estas conductas involucran actos como mutilación, necrofilia y actos sexuales sobre los restos humanos y aclara que, a nivel administrativo, los panteones tienen la obligación de controlar y vigilar los sepulcros y cadáveres según los contratos celebrados.

Granados Atlaco también menciona que, si un sepulturero o autoridad liberan el espacio de una fosa, pueden estar cometiendo un delito de exhumación, que consiste en sustraer restos humanos sin cumplir con los requisitos legales. Las personas involucradas pueden ser sancionadas administrativa e incluso penalmente.

El experto señala que las personas ajenas a los panteones, como estos sepultureros “voluntarios”, no deberían estar presentes a menos que presten un servicio bajo contrato, por lo cual, la responsabilidad recae en quien ordene la exhumación.

Además: “Que las personas que no tienen un contrato de prestación de servicios no deberían estar involucradas en los panteones. Esta práctica nociva ha existido durante mucho tiempo. En los panteones, siempre hay individuos que ofrecen sus servicios”.

Ante el hecho de que el panteón violó el contrato entablado con Alma Aguilar, el abogado Granados explica que: “Si en algún momento cualquier encargado de un cementerio o autoridad propia libera el espacio, podría estar cometiendo las conductas de profanación, ya que estamos hablando del artículo 208. Sin embargo, el artículo 207, del código penal de la CDMX se refiere al delito de exhumación, que implica sustraer los restos humanos sin cumplir con los requisitos legales” y en última instancia, ambas sanciones pueden acumularse.

CAVARON EL EN LUGAR EQUIVOCADO 

Ante esta situación, las hermanas Aguilar solicitaron que se revisara la tumba de su padre y la fiscal de Iztacalco lo aceptó, sin embargo en la primera instancia realizaron la zanja en el lugar equivocado, por lo cual la hermanas siguen sin saber cuál es el paradero de su padre. 

@MarRome259 

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