Los dardos de Sanjuana Martínez

CONFIDENTE EMEEQUIS

EMEEQUIS.- Sanjuana Martínez lanzó un dardo envenenado en el corazón de la 4T. Su denuncia, de que en la Secretaría del Trabajo le pidieron un moche para la campaña de Claudia Sheinbaum será utilizada como evidencia del financiamiento ilegal de la campaña presidencial de Morena. 

Xóchitl Gálvez presentó la denuncia respectiva por financiamiento ilegal ante el INE. Es probable que la Unidad de Fiscalización no avance demasiado, porque la situación no prosperó, ya que, de acuerdo con la versión de la exdirectora de Notimex, nunca aceptó la propuesta que le habrían hecho. 

En términos legales el asunto no avanzará, porque la Fiscalía de Delitos Electorales no moverá un dedo para indagar el tema y porque se trata de dichos, es decir, de testimonios que al parecer no pueden ser acompañados de pruebas, como podrían ser grabaciones. 

Por lo pronto, en la Secretaría del Trabajo desmintieron las afirmaciones de Martínez y el presidente López Obrador le pidió, a quien fue su colaboradora, que presente pruebas sobre lo que narró en dos amplios artículos. Martínez contestó que sus abogados harán lo conducente sobre esos hechos. Ya veremos. 

Pero lo relevante del asunto está en que la denuncia de Martínez ilustra el pleito interno que arrecia al interior de Morena y en el entorno de Palacio Nacional. 

Se acerca el final del gobierno y las diferencias se irán profundizando. Van a tener que buscar culpables para la serie de desastres que se desataron desde diciembre del 2018 y Notimex es un ejemplo de ello. 

A Martínez le encargaron, o supusieron que lo haría de todas formas, destruir a Notimex. Lo hizo con empeño y lo logró. Un triste papel que nadie le reconocerá porque los afanes ya están enfocados en otros asuntos y porque nadie quiere ocuparse de los asuntos turbios. Sin embargo, ahí están, soltado toda clase de excrecencias. 

Es un misterio por qué decidió salpicar a Sheinbaum, que es la realmente afectada, aunque el centro del pleito para Martínez sea la familia Alcalde. En parte se entiende que así sea, porque la entonces secretaria del Trabajo, Luisa Alcade, ahora titular de Gobernación, nunca les dio la razón a los directivos de Notimex y es que era difícil, en términos legales, el acompañar los disparates de una funcionaria que nunca intentó conciliar y que se dedicó a despedir y a denostar a periodistas con una larga carrera dentro de la agencia informativa.

Martínez también caracteriza a Arturo Alcalde Justiniani, el padre de la encargada de la política interna, como una suerte de Padrino que presionó para que los inconformes fueran reinstalados. 

De acuerdo con el sindicato de Notimex, Alcalde Justiniani nunca los asesoró, aunque es sabido que es uno de los abogados laboralistas con una amplia cartera de clientes, pero también con un prestigio que se no se le puede regatear por la grilla que ahora impera en el grupo que está en el poder. 

En el fondo, si nos atenemos a las quejas de Martínez, todo es cuestión de dinero, porque en realidad está molesta con lo que obtuvieron los trabajadores de Notimex y con lo que no acabaron de darle a ella y a quienes fueron sus colaboradores. 

Lo más lamentable, sin embargo, radica en que no exista reproche alguno sobre el drama que en realidad significó el terminar con una historia de cinco décadas. 

Notimex sobrevivió a toda clase de problemas, pero es evidente que era imposible que existieran las herramientas adecuadas para sobreponerse a la 4T y a la que designaron como directora.

Las instituciones no suelen estar equipadas para la locura y menos todavía cuando está se trasforma en una suerte de instructivo para dinamitar lo que en el pasado tuvo prestigio y funcionó. 

Martínez termina su paso por el gobierno, pero alguien debería hacerse cargo del profundo daño que eso significó. 

LAS VÍSPERAS DE 2024

Guadalupe Taddei obtuvo del TEPJF el salvoconducto para que las áreas más relevantes del INE puedan funcionar con encargados de despacho, ante la evidencia de que no se han logrado propuestas que alcancen el respaldo necesario en el Consejo. 

Todo el sistema electoral transita, por lo visto, a la precariedad de nombramientos e integraciones. En la Sala Superior del propio Tribunal sigue extrañado que se nombren a las dos magistraturas faltantes, lo que seguramente redundaría en determinaciones que no necesariamente son las que ocurren en este momento.

@jandradej

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