La república militar para un desfile

CONFIDENTE EMEEQUIS

EMEEQUIS.– Cuando las burbujas de la euforia de la 4T se desvanezcan, quienes quedarán más mal parados serán los militares, descobijados ante la evidencia de violaciones a la Constitución más que deliberadas, que no son atribuibles a ellos, pero de las que serán los paganos. 

Si algo quedó en claro en la Sesión del Senado de la República en la que se debatió el destino de la Guardia Nacional, que pasará a ser una dependencia de la Secretaría de la Defensa, fue que el despropósito de lo planteado por el presidente López Obrador, tiene el rasgo de lo inaudito. El carácter civil de esa institución de seguridad es intocable de acuerdo con el Artículo 21 constitucional.

Es como ir en sentido contrario en una carretera y a gran velocidad. Tarde o temprano vendrá en encontronazo, con la propia realidad.

El senador Miguel Ángel Mancera, coordinador de la bancada del PRD, lo describió como las fichas de dominó que irán cayendo, una a una, cuando el Poder Judicial resuelva lo que todos saben de antemano, que las leyes secundarias no pueden estar encima de la Constitución.  

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El senador recordó que el acuerdo que dio origen a la Guardia Nacional, y que tuvo que ser consensuado con todas las fuerzas políticas, contemplaba el fortalecimiento de las policías estatales y municipales, por la sencilla razón de que el 80 por ciento de las cuestiones de orden legal pasan por las fiscalías y los cuerpos de seguridad en las entidades. Un aspecto crucial, pero que tampoco importó en los años recientes y las consecuencias están a la vista.

Un aspecto adicional, es que la Secretaría de la Defensa en realidad estaría realizando labores de investigación para la persecución de los delitos, ya que los integrantes de la Guardia serán soldados, en mando y en forma. Esto es muy delicado, y quizá ni se ha contemplado. 

Ese es el meollo de la reforma que traslada a la Guardia Nacional por completo a la Secretaría de la Defensa, borrando todo rastro de lo civil. 

Vamos, señaló la senadora Claudia Ruiz Massieu, a una especie de República Militar. Describió lo que le parecen francas violaciones al texto constitucional que provienen de “colocar la voluntad partidista por encima de las leyes”. 

Pues sí, mucho de lo que ocurre proviene del desparpajo con que se hacen las cosas desde Palacio Nacional. Desde ahí se ordena, pero después operan las cosas sin el mínimo cuidado de las formas y las leyes.  Por eso, como afirma Ruiz Massieu, es que estamos ante un fraude a la Constitución.

La senadora describió las carencias policiales que hemos sufrido, a lo largo de los años, pero apuntó que “no hay uniforme mágico” que resuelva los problemas, porque lo que se requiere es trabajo arduo, de años, para forjar instituciones. 

Sea o no deliberado lo que está pasando, lo evidente es que el país va a contracorriente de las democracias en todo el mundo, pero, además, sin sentido común alguno. 

Lo curioso es que ya pasamos por todo esto, cuando la Suprema Corte tuvo que invalidar, en noviembre de 2018, la Ley de Seguridad Interior que promovió el presidente Enrique Peña Nieto, porque perpetuaba el uso de las fuerzas armadas en tareas que no les corresponden.

Emilio Álvarez Icaza calificó la situación como la de un golpe militarista a la Constitución. Palabras fuertes, sin duda y que se añadieron a un recordatorio: “el pueblo de México no le dio permiso a Morena para modificar la Constitución”, ni en 2018 y mucho menos en 2021. 

En ello coincidió con su compañero del Grupo Plural, Germán Martínez, quien hizo toda una exposición de carácter histórico, para mostrar cómo los pretendidos juaristas del presente, están tan lejanos del Benito Juárez del pasado, quien prendía que los militares estuvieran sometidos a los civiles. 

Pero el senador de Michoacán dio una pista que quizá explique la falta de cordura legislativa y las prisas de la bancada mayoritaria y de sus aliados: les dieron la instrucción de apoyar la transferencia del mando, porque urge que eso esté listo para el desfile del 16 de septiembre, no sería raro que eso fuera.

@jandradej

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