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La oposición, pasos para no perderse
Hoy, más que nunca, quien no se mueva no saldrá en la foto. La oposición está dando los primeros pasos para definir a sus aspirantes a la Presidencia de la República, para no rezagarse con respecto a Morena.
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CONFIDENTE EMEEQUIS
EMEEQUIS.– La oposición está dando los primeros pasos para definir a sus aspirantes a la Presidencia de la República, pero sobre todo para no extraviarse en los mares embravecidos del presente. El PAN acaba de realizar el foro “Cambiemos México. ¡Sí hay de otra!”, y en el PRI ya se aprestan a realizar ejercicios similares.
Si bien la construcción de una candidatura es un asunto complejo, y más si se intentará que sea en el paraguas de Va por México, lo peor es quedarse rezagados, porque en Morena las cosas ya iniciaron.
Uno de los cambios significativos es que las formas y los tiempos para encarar los procesos electorales ya no son los de antes, ni se apegan a muchas de las formalidades que parecían inamovibles. Hoy, más que nunca, quien no se mueva no saldrá en la foto.
En la primera comparecencia ante la sociedad civil, participaron Santiago Creel, exsecretario de Gobernación y presidente de la Cámara de Diputados; Mauricio Vila, gobernador de Yucatán; la también mandataria, pero de Chihuahua, Maru Campos, y el diputado y exgobernador de Guanajuato, Juan Carlos Romero Hicks. El queretano Mauricio Kuri participó con un video, por cuestiones de agenda.
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El formato no permitió el debate, por lo que la sustancia se concentró en las participaciones de cada uno de ellos y en el esbozo que hicieron sobre las experiencias de gobierno del PAN, contrastando con las administraciones de Morena.
Lo lograron, aunque los organizadores deberían ser mucho más audaces, si lo que quieren es generar audiencias que no se queden en un público cautivo y que, al final del día es el voto duro. Todos los partidos tienen que resolver sus pactos internos, pero es evidente que la gran batalla es externa.
Si algo se sacó en claro del Foro, fue que los panistas están determinados a dar la batalla, a no permitir, como expresó Creel, que México sea un país donde decide un solo hombre, en este caso el presidente de la República, “un mandatario que divide y polariza”.
En efecto, si una cosa ha hecho el panismo, a lo largo de su historia, es la de apostar por el acuerdo y las reformas, cuando son oposición y estando en el poder también.
Hay que destacar que se van configurando posibilidades de quienes han tenido altas responsabilidades, porque no es para nadie un secreto que la reconstrucción institucional que se tendrá que emprender, va a requerir de un fogueo previo y de capacidades notables.
Pero al mismo tiempo saben, y lo dijeron, que se tiene que buscar la unidad con otras fuerzas políticas para ser competitivos. Ahí está una de las aduanas más difíciles, pero es indispensable pasar por ella.
El reto más inmediato consistirá en ponerse de acuerdo con el PRI y el PRD en Coahuila y el Estado de México.
En el PRI también se empiezan a expresar figuras y aspiraciones. Enrique de la Madrid, quien fue secretario de Turismo en la administración de Enrique Peña Nieto; la senadora Beatriz Paredes, una de las políticas con mayor experiencia, y el exsecretario general de la OCDE, José Ángel Gurría.
Más allá de posibilidades, al menos ya se configuran propuestas serias.
La receta, para que el proyecto opositor sea competitivo, tendrá que estar atada a la participación de la sociedad civil. Creel recordaba que en la construcción de Va por México se escuchó a cerca de 500 organizaciones ciudadanas, que establecieron una agenda común. Eso fue en alguna medida la experiencia de Sí por México.
Es probable que se siga esa misma ruta en los próximos meses, aunque seguramente se tendrá que evaluar lo que ocurrió con los diputados del PRI en la Cámara de Diputados, donde faltaron a su compromiso, inclusive firmado, de no aprobar medidas que profundizaran la militarización.
Y, para mayor complejidad, todavía falta sortear la embestida que ya inició Morena contra el INE, prueba decisiva para la oposición y para el sistema democrático mismo.
Más allá de explicaciones o inclusive de matices, es evidente que la dirigencia del PRI va a tener que restaurar la confianza de quienes los apoyaron en el 2021. No será sencillo.
@jandradej
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