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Elecciones 2024: ¡No corro, no grito, no empujo!
Este simple ejercicio en caso de un sismo no sólo debería aplicarse en el ámbito de la protección civil: muchos políticos deberían utilizarlo a la hora de gestionar sus ambiciones. ¿Cómo lo hacen Sheinbaum, Ebrard y Monreal?
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EMEEQUIS.– Tras el sismo de 1985, México comenzó a construir una estrategia de cultura ciudadana para actuar durante un movimiento telúrico, con el propósito de salvar vidas ante un fenómeno natural. El gobierno federal puso en marcha una serie de pasos para tratar de disminuir la sensación de miedo entre la gente. Una frase sintetizaba la estrategia: “¡no corro, no grito, no empujo!”.
“No corro” corresponde al ideal de buscar un ordenamiento al momento de desalojar un edificio, porque cuando se está saliendo de cualquier domicilio aflora el pánico de las personas que lo habitan, pero también continúan los movimientos que son propios del sismo.
“No grito” pretendía que, al momento de desocupar un sitio, las personas puedan escuchar los sucesos o indicaciones que se dan a su alrededor, además de evitar la generación de pánico entre las personas.
“No empujo” es justamente la indicación que pretende inculcar el respeto de la integridad física de las personas con las que se convive, también busca evitar que una persona caiga y con ello generar un efecto de cuello de botella.
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Sin embargo, este simple ejercicio de comportamiento en caso de un sismo no solo debería aplicarse en el ámbito de la protección civil, sino que debería ser un mensaje lo suficientemente claro para muchos políticos que actualmente están desesperados por abrirse paso rumbo a las elecciones del 2024.
LOS ASPIRANTES DE MORENA
Tenemos por lo menos tres claros ejemplos que buscan la candidatura del partido Morena, agrupación que, según todas las mediciones que se han realizado, ganaría los comicios del 2024 con cualquiera de sus abanderados. Por eso la lucha en este momento es descarnada.
Un claro antiejemplo de “No corro” y que actualmente está corriendo a toda velocidad es la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, quien desde el 2021 busca a toda costa aparecer en cualquiera de los terrenos que le permitan ganar visibilidad para obtener la candidatura en el 2024.
“No grito” sin duda es para el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, quien desde que llegó a este puesto ha logrado que su figura y discurso aparezcan en todos los medios de comunicación habidos y por haber. El canciller, por órdenes del presidente Andrés Manuel López Obrador, se ha ocupado de resolver cualquier asunto de Estado, que va desde problemas en materia de seguridad hasta la actual crisis sanitaria por Covid-19.
Y, por último, una clara trasgresión de “No empujo”, y que viene empujando desde el 2020 –más abiertamente en el 2021 y a inicios de este 2022–, es el senador Ricardo Monreal, quien está dispuesto a mover a quien tenga que mover sin importar los costos que pudiera generar en el partido que representa. Monreal está completamente convencido de que él estará en la boleta electoral de 2024.
Sin lugar a dudas, al interior de Morena, las elecciones presidenciales comenzaron desde el primer día que AMLO llegó a Palacio Nacional y estos tres personajes no están esperando a que se den los tiempos indicados por las leyes electorales, sino más bien están corriendo los riesgos necesarios para lograr la codiciada candidatura. Ya veremos si desobedecer las indicaciones logra que materialicen su deseo.
@LuisHurRa