Non sed ipsam reiciendis. Et eos reiciendis quo voluptatem et dolorem neque. Exercitationem nobis labore ab fugit facilis. Porro quia…
El lado fifí de Delfina. La vida entre bolsos Gucci de la maestra texcocana
Tras la leyenda de maestra rural, Delfina Gómez Álvarez tiene una historia de consumada aspiracionista; egresada del Tec de Monterrey, es también coleccionista de bolsos Louis Vuitton, Chanel y Gucci, vínculos con el colegio más costoso de Texcoco y años de disfrutar de las mieles de los cargos sindicales en el magisterio
Non sed ipsam reiciendis. Et eos reiciendis quo voluptatem et dolorem neque. Exercitationem nobis labore ab fugit facilis. Porro quia…
EMEEQUIS. ― Detrás de su leyenda de maestra rural, Delfina Gómez Álvarez tiene una historia de consumada aspiracionista: egresada del Tec de Monterrey, coleccionista de bolsos Louis Vuitton, Chanel y Gucci; representante legal del colegio más costoso de Texcoco, empoderada dirigente sindical…
Antes de que la fama, la política y el poder se le vinieran encima, Gómez Álvarez ya se mezclaba con las mejores familias de Texcoco.
Su ruta de ascenso inicial fue el sindicalismo. A sus 24 años, en 1986, se integró al comité ejecutivo de la Sección 34 del Sindicato de Maestros al Servicio del Estado de México (SMSEM), un organismo que figura entre las estructuras clientelares del poder priísta de la entidad, y cuyas posiciones implican prebendas económicas y cuotas de poder.
TE RECOMENDAMOS: DELFINA GÓMEZ SE SINCERA CON SUS COLABORADORES: “NO SE PREOCUPEN, EL PRESIDENTE ME QUIERE”
Y a sus 28 años, formaba parte ya del cuerpo directivo del Columbia School, un colegio destinado a consumidores de altos ingresos que no sólo ha educado a los hijos de las familias más pudientes de la región, sino que, además, de su cuerpo directivo han surgido al menos dos senadores de la República: la propia Delfina Gómez, y el expresidente estatal del PRI, Mauricio Valdés Rodríguez, donde ambos políticos entraron en contacto cotidiano.
En entrevista con EMEEQUIS, el propio exsenador, que preside la institución, rememora la época en que Delfina Gómez llegó al mencionado colegio, a principios de los años noventa, a quien recuerda por su buen trato con los padres de familia.
― ¿Cómo la reclutaron?, se le inquiere.
― Pues la hermana de la maestra Delfina ya trabajaba aquí (…) No, no recuerdo su nombre, pero aquí en Texcoco todos nos conocemos. Antes no era tan grande, pero siempre nos hemos conocido las familias de Texcoco, sobre todo en la cabecera municipal ―dice Valdés Rodríguez.
Faltaba mucho por entonces para que el cacicazgo político local, conformado por la mancuerna de los entonces perredistas Higinio Martínez y Horacio Duarte, convirtiera en alcaldesa a Delfina, la plataforma que al cabo la encumbraría como candidata de Morena al gobierno del estado de México en 2017, y en la era del poder obradorista, en secretaria de Educación Pública.
El sindicalismo y la gerencia escolar quedaron entonces atrás. Desde su arribo a la Secretaría de Educación Pública (SEP), Delfina Gómez habría de disponer de un amplio staff, entre secretarias, asistentes, “acompañantes” ―detesta llamarles guaruras― y chofer, con Suburban o GMC a la puerta. Eso sí, “todos texcocanos”.
TE RECOMENDAMOS: ASÍ OPERABA LA ESTRUCTURA PARALELA DE LOS “DIEZMOS”. DELFINA GÓMEZ, EN LA MIRA DE LA OPOSICIÓN
Quedaron manifiestas también ciertas debilidades por accesorios finos, como la “montaña” de bolsos costosos que, según comenta Luz Elena Chávez, la autora del “El Rey del Cash”, en entrevista con EMEEQUIS, atesora la senadora Gómez en su morada texcocana:
“Todas las bolsas que tiene en esa habitación, no sé la cantidad, pero está lleno, hasta en la cama, en los burós (…), todas de diseñador, de marca, o sea Gucci, Luis Vuitton, Chanel, de 40 mil, 50 mil pesos cada una”.
EL ASCENSO SINDICAL
Delfina Gómez Álvarez egresó de la Escuela Normal Número 21 de Texcoco en 1989, y en 1992 se recibió como licenciada en educación básica de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), de acuerdo con registros de la SEP.
Pero desde años atrás ingresó al sistema público de educación. De acuerdo con la ficha publicada por el Sistema de Investigación Legislativa de la Secretaría de Gobernación, desde 1982, a los 20 años, ejercía como profesora.
De acuerdo con el currículum que divulgó cuando era candidata a la alcaldía de Texcoco (2012), Gómez Álvarez fue orientadora técnica de la Escuela Secundaria Oficial 130 “Nezahualcóyotl” de 1985 a 1986.
Fue en ese último año cuando inició su vida sindical, con 24 años de edad, como secretaria de Relaciones el comité ejecutivo de la Sección 34 del Sindicato del SMSEM, donde se desempeñó hasta 1989. Al mismo tiempo daba clases en el Centro Escolar Nezahualcóyotl.
GERENCIA EDUCATIVA
En 1991, a sus 28 años, Delfina Gómez fue reclutada para integrarse al consejo directivo del colegió de mayor abolengo de Texcoco, y de hecho se convirtió en la representante legal: Columbia School.
El colegio, destinado a consumidores de altos ingresos, no sólo ha formado a los hijos de las mejores familias de la región, sino que, además, entre su cuerpo directivo han surgido al menos dos senadores de la República: la propia Delfina Gómez, y el expresidente estatal del PRI, Mauricio Valdés Rodríguez. Ambos coincidieron en esa institución en aquella etapa de inicios de los noventas.
Por entonces, el país era gobernado por Carlos Salinas de Gortari, el estado de México era conducido por Ignacio Pichardo Pagaza, Valdés Rodríguez ejercía el liderazgo tricolor en la entidad, y además de estar en funciones de senador de la República, simultáneamente, formaba parte de la administración de Columbia School, que presidía Sharon Marie Cantera de Nuncio.
Exalcalde de Texcoco (1972-75), diputado federal y local en múltiples ocasiones, Mauricio Valdés renunció al PRI en 1997, para integrarse al PRD como consejero nacional, donde disputó la candidatura del sol azteca al gobierno del estado de México en 1999, la cual recayó en su coterráneo, Higinio Martínez, con quien se le reconoce una sólida relación.
El exsenador se alejó de los ámbitos de poder después de ese proceso, pero el gobernador Eruviel Ávila (2011-17) lo reintegró a la vida pública. Al inicio de esa gestión, Mauricio Valdés asumió la dirección del Instituto de Administración Pública del Estado de México (IAPEM), que en el mismo movimiento dejó de ser una asociación civil para convertirse en un organismo descentralizado del gobierno estatal. Ejerció el cargo hasta 2019.
En octubre de 2020, el Congreso del Estado de México, entonces bajo dominio de Morena, nombró a Mauricio Valdés como coordinador general del Secretariado Técnico para la elaboración de una nueva constitución local.
En entrevista, Valdés Rodríguez, que preside la administración de Columbia School, recuerda los años en que Delfina Gómez condujo la primaria de la institución, la cual imparte desde preescolar hasta secundaria, y durante largo tiempo también contó con preparatoria:
―Ella es una maestra que se distingue por el cariño a los niños, por el buen trato con los padres de familia, y con otros profesores, es una mujer sencilla, y siempre superándose en sus conocimientos y en su desempeño profesional. (…)
― ¿Cómo la reclutaron?
― Pues la hermana de la maestra Delfina ya trabajaba aquí (…) No, no recuerdo su nombre, pero aquí en Texcoco todos nos conocemos. Antes no era tan grande, pero siempre no hemos conocido las familias de Texcoco, sobre todo en la cabecera municipal.
― ¿Cómo diría que fue su desempeño?
― Fue una etapa muy fructífera para el desempeño de sus alumnos, para la escuela, desde luego. Maestras y directoras como ella, es lo que le ha permitido (a Columbia School) consolidar su prestigio como la mejor escuela bilingüe de Texcoco y de la región. (…) Ella después pasó al Centro Escolar Nezahualcóyotl, que es la escuela pública de Texcoco con mayor número de alumnos. Soy egresado de esa escuela. Y la maestra fue ahí directora. Y ahí fue donde se involucró más en la política porque participó en el sindicato de maestros.
LOS AÑOS MARAVILLOSOS
Pero para quien había sido más fructífero el paso por aquel colegio era para la propia Delfina Gómez. Se quedó en la dirección de la primaria de Columbia School hasta 2006.
Fue en el segundo año en esa responsabilidad, en 2002, cuando concluyó sus estudios de maestría en Educación, con especialidad en administración de instituciones educativas, en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM).
Ese mismo año, no después, asumió la dirección del Centro Escolar Nezahualcóyotl, que mantuvo hasta 2011.
Es decir, había mantenido, de manera simultánea, su plaza magisterial en el sistema público y, sobre todo, su actividad sindical. Justo en 2001, cuando ingresó al cuerpo directivo del colegio privado, Gómez Álvarez había alcanzado la secretaría general delegacional del SMSEM, bajo el liderato estatal de Trinidad Franco Arpero, quien terminaría como diputada del PT en 2021.
De acuerdo con dirigentes de ese ese gremio, consultados por EMEEQUIS, la secretaría general delegación implica diferentes prebendas. Además de presupuesto permanente para viáticos, la posición conlleva un generoso presupuesto bimestral destinado a actividades gremiales que con frecuencia son utilizados de manera discrecional por los dirigentes.
La gestión de plazas, los favores, las gestiones y promociones que quedan en manos de dichos dirigentes, crean con frecuencia grupos adictos, y consecuentemente, clientelas políticas.
Pero, a Delfina, el liderazgo delegacional le había dado, además, un contacto que sería, insospechadamente, la clave para su despegue político: la amistad con la maestra Margarita.
2012: LA MAESTRA MARGARITA
En 2012, el cacicazgo político local ejercido en mancuerna por los perredistas Higinio Martínez Miranda y Horacio Duarte, había alcanzado un desgaste mayúsculo.
Los liderazgos intermedios del perredismo texcocano pugnaban por romper el monopolio de las postulaciones y de las posiciones administrativas del ayuntamiento de ese poderoso grupo.
Higinio Martínez había sido dos veces diputado local (1990-93, 2006-09), senador (1997-2000), presidente municipal (2000-03), presidente estatal del PRD (1995-1997), candidato a gobernador (1999).
Horacio Duarte, había tenido ya las posiciones de regidor (1991-93), secretario del ayuntamiento (1994-96), diputado local (1996-2000) y federal (2003-06), presidente municipal (2000-03), presidente del comité municipal del PRD (1991-93), representante del mismo ante Instituto Federal Electoral (IFE) (2005-07).
Los grupos perredistas rechazaron una nueva designación de candidato por parte del cacicazgo dual de los exalcaldes, quienes arrastraban una oscura estela de sospechas de corrupción, insistentemente denunciada en medios regionales.
Además, lideraban el Grupo Acción Política, (GAP), una tribu estatal del PRD, formado por alcaldes, legisladores, y sus respectivos políticos, que lo mismos intercambiaban personal que contrataciones, de acuerdo con recurrentes denuncias de la prensa local.
También venían imponiendo en la alcaldía texcocana a personajes afines a sus intereses y obsecuentes con sus decisiones. De modo que el PRD municipal se escindió.
El candidato fue Costanzo de la Vega Membrillo. Fue entonces cuando entró en escena “la maestra Delfis”. Habituados a instalar a sus respectivos equipos en las planillas para el ayuntamiento y en las posiciones administrativas de la alcaldía, Higinio y Duarte no podían renunciar a controlarlo.
Ya contaban con las siglas con competirían: sus amigos del PT y MC no les negarían el membrete, pero ellos mismos no podían ser los candidatos, pues sus liderazgos estaban seriamente desgastados.
Tenía que ser alguien cercano, pero no tanto como un familiar, ni siquiera en segundo grado, pues ya todos estaban identificados.
“La solución fue la maestra Delfina, quien sostenía una amistad con la maestra Margarita Ramírez, tanto por haberse desempeñado en el mismo centro laboral que la maestra Delfina, como por haber tenido apoyo de ella en el sindicato”, dice un experredista, retirado de la política, bajo condición de anonimato.
Mauricio Valdés confirma la relación, cuando se le menciona que la maestra Margarita Ramírez es como una de las más cercanas a la maestra Delfina, y detalla:
“Sí, la maestra Margarita ha sido profesora de educación preescolar… Coincidieron profesionalmente y además se hicieron de una gran amistad. Ella ha estado en las escuelas estatales. La maestra Delfina tiene muchas maestras que fueron compañeras de generación en la normal”.
Margarita Ramírez es consuegra de Higinio Martínez. El hijo de este, Ernesto Martínez Mejía, es esposo de la hija de aquella, Elizabeth Terrazas Ramírez.
Higinio Martínez con su nuera Elizabeth Terrazas Ramírez.
EL PODER DEL BAJO PERFIL Y EL NACIMIENTO DE LA LEYENDA
Para la campaña, la maestra Delfis, como comenzaron a llamarla, abandonó los trajes sastres y los peinados con crepés de violentos vuelos ochenteros ―no los retomaría sino hasta la toma de posesión―, y asumió su imagen de fin de semana: vaqueros y blusas o playeras holgadas, un morral cruzado, el pelo cortísimo.
Aquella imagen, sumada a sus modos pueblerinos, sus giros verbales coloquiales, fueron un éxito. Ganó la elección.
Los nombres de los colaboradores eternos de Higinio Martínez y Horacio Duarte volvieron así al directorio municipal. El propio Duarte asumió la secretaría del ayuntamiento, y el hermano de Higinio, Alberto Martínez Miranda ―actual director del Centro Escolar Nezahualcóyotl― fue nombrado tesorero de la alcaldía.
La “maestra Delfis” reservó para Elizabeth, la hija de su amiga, la maestra Margarita, la dirección del DIF, cargo que conservó en el siguiente trienio, cuando su suegro regresó como alcalde.
Vinieron después los enjuagues de siempre, la ordeña de la nómina y la estructura paralela para financiar al GAP; los cheques firmados por Horacio Duarte, Alberto Martínez Miranda y la propia Delfina Gómez, y el famoso finiquito que la alcaldesa se dio al cierre de la administración, por 440 mil pesos.
“Desde un principio Higinio y Duarte se mostraban muy divertidos con la maestra Delfina, y muy complacidos con la obediencia de ella ―cuenta el experredista ya citado―, pero ya no les hizo gracia cuando el licenciado López Obrador comenzó a hablarles del excelente perfil que pintaba la maestra para candidata de Morena al gobierno del estado, ya en 2017”.
Y detalla: “Al licenciado López Obrador le parecía muy bien que el papá de la maestra hubiese sido contratista, albañil también en realidad, en sus inicios, porque hablaba de gente del pueblo, y más con los modos de ella”.
2017, DELFINA, UN CRACK… CON GUSTOS DE COLECCIONISTA
Los encantos populares de Delfina Gómez Álvarez hicieron lo suyo, nuevamente, en la elección de gobernador de 2017. Obtuvo 31.86% de la votación, la más alta de un candidato de izquierda en elecciones mexiquenses. Quedó a sólo 2.87 puntos porcentuales del ganador, el priísta Alfredo del Mazo.
Aquel fue el lanzamiento de Delfina Gómez para convertirse en una estrella de la era obradorista. Primero, senadora, y muy poco después, titular de la SEP.
En adelante, ya no le llamaron “la maestra Delfis”, sino, llanamente, “la maestra”, como si sólo hubiera una en el mundo.
“La maestra” se habituó ya a disponer de un amplio staff, entre secretarias, asistentes, “acompañantes” y chofer que la llevan todos los días a Texcoco, porque, en efecto, sigue viviendo ahí. Generalmente la trasladan en Suburban, eventualmente en GMC.
Pero también comenzaron a ser expuestas sus debilidades, excentricidades, sus secretos. En su libro, “El Rey del Cash”, Luz Elena Chávez, relataba las manías de coleccionista de Delfina Gómez.
En entrevista con EMEEQUIS, amplía las referencias sobre esa debilidad de la precandidata morenista al gobierno del estado de México. Cuenta que la conoció cuando era alcaldesa de Texcoco, y que le pareció “un títere de Higinio”.
Luz Elena, que ha dedicado una vida al rescate de animales callejeros, acudió a Delfina para atender esa problemática en el municipio, alertada por activistas amigos suyos, que denunciaban una situación grave. Pero dice que la alcaldesa no podía tomar una decisión sin consultar a Higinio Martínez, entonces poderoso coordinador de Morena en la legislatura estatal.
Su mayor sorpresa, sin embargo, ante la personalidad de Delfina Gómez, es otra: su colección de peluches y de bolsos de marcas costosas, “una auténtica montaña”.
Relata: “Realmente es fetichista, tiene un cuarto en su casa lleno de peluches, de todo tipo de peluches está inundado, en la sala, por donde quiera tú ves peluches, muñecos de diferentes tamaños. Pero también, en otra habitación de su casa, tiene las bolsas de marca, no de cualquier marca, son de diseñador, o sea este Gucci, Luis Vuitton, todos estos diseñadores de alta costura, internacionales, está lleno ese cuarto de bolsas”.
“Muchas de estas bolsas ―refiere― se las han regalado por los puestos que ha tenido y por quedar bien. ¿Te acuerdas que el presidente prohibió que sus subordinados recibieran regalos costosos? Bueno, pues no. Ninguno le hace caso. Simplemente Delfina, si acepta una bolsa que es de Gucci, de 40, de 50 mil pesos, pues imagínate. Todas las bolsas que tiene en esa habitación, no sé la cantidad, pero está lleno, hasta en la cama, en los burós, las bolsas están a la vista porque ya no caben, y todas son de diseñadores internacionales, Gucci, Louis Vuitton, Chanel, las mejores marcas de diseñador que te puedas imaginar, las tiene Delfina en ese cuarto”.
@estedavid
Powered by Froala Editor