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Gobierno de Querétaro conocía las irregularidades de la empresa de seguridad privada
Las oficinas de G.S.E K9 están en una casa particular, contrata personal el mismo día del evento –lo que implica falta de capacitación– y al menos desde 2018 tenía quejas por malos tratos a los aficionados, además de que falló en su obligación de decomisar “objetos que pongan en riesgo la integridad y seguridad de los asistentes”.
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EMEEQUIS.– La empresa G.S.E. K9, que fue suspendida por el gobierno de Querétaro a raíz de las fallas en los hechos de violencia, tiene un historial de irregularidades en el cumplimiento de protocolos de seguridad que era conocido desde la administración anterior.
Además del Estadio Corregidora, la empresa prestaba sus servicios en diversos lugares de la entidad, de acuerdo con declaraciones del gobernador Mauricio Kuri, quien afirmó: “dimos de baja cuanto antes ya a esta empresa, que incluso daba más servicios aquí en el estado (Querétaro)”.
Entre las irregularidades principales están: no tiene oficinas formales, contrata personal el mismo día del evento –lo que implica falta de capacitación– y al menos desde 2018 tenía quejas por malos tratos a los aficionados de las que el gobierno estaba enterado, como se demuestra en una solicitud de información.
Y una falla que probó ser fundamental en los hechos de violencia del sábado 5 de marzo. Las empresas de seguridad privada tienen la facultad de decomisar “aquellos objetos que pongan en riesgo la integridad y seguridad de los asistentes”.
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Como se vio en distintos videos, coberturas de medios, fotografías de redes sociales, muchos de los agresores tenían objetos contundentes como tubos y palos, e incluso armas blancas, como la navaja con la que un aficionado cortó la red de la portería, y que luego le entregó a una mujer.
Esta facultad y obligación de las empresas de seguridad privada viene especificada en la respuesta oficial a un aficionado que se quejó ante el gobierno en 2018 porque estas empresas lo despojaron de una camiseta del Cruz Azul.
Esta empresa contrata personal el mismo día, por lo que no hay capacitación adecuada.
CARENCIAS, OMISIONES, FALLAS
Esta empresa ha prestado servicios de seguridad al menos desde 2017 en el Estadio Corregidora sin contar con infraestructura suficiente, además de presentar carencias y omisiones en equipo.
Susana Pantoja Luna es la responsable de dicha empresa, con el permiso S.S.C./S.S.P./394 emitido por parte del gobierno del estado. Sin embargo, al prestar sus servicios solamente en Querétaro, no cuenta con la acreditación correspondiente por parte de la Dirección General de Seguridad Privada de la Secretaría de Seguridad Pública.
De acuerdo con la Ley Federal de Seguridad Privada, la responsabilidad de su vigilancia en cuanto a su funcionamiento recae en el ejecutivo estatal.
El nombre comercial con el que funciona es Grupo Servicios de Élite K9 (G.S.E. K9). A raíz de lo sucedido en el encuentro Gallos Blancos contra Atlas, bajó su información de Facebook, por lo que en estos momentos la página aparece sin contenido.
Respuesta oficial en la que se menciona a esta empresa y la obligación que tiene de retirar objetos que puedan hacer daño.
EL GOBIERNO ESTATAL SABÍA
De acuerdo con información del portal de transparencia del INAI, mediante la respuesta número 00748517 de enero de 2018, el Poder Ejecutivo de Querétaro conocía de la situación, ya que respondió una solicitud de información de un aficionado al Cruz Azul, quien acudió al Estadio Corregidora y denunció un trato inadecuado por parte del personal de seguridad (lo despojaron de su camiseta).
En la respuesta, el gobierno de Querétaro afirmó en ese entonces que una de las empresas privadas encargadas de la seguridad del estadio era G.S.E. K9, por lo que desde ese tiempo existen pruebas documentales del conocimiento que tenía el gobierno del estado, tanto de la empresa, como de irregularidades en el cumplimiento de los protocolos en los juegos de futbol.
Y, en esa misma respuesta, el gobierno, encabezado en ese entonces por el también panista Francisco Domínguez Servién, deja ver un punto clave: la empresa de seguridad privada tenía la obligación de decomisar objetos peligrosos.
“Dichas empresas se encuentran facultadas para decomisar únicamente aquellos objetos que pongan en riesgo la integridad y seguridad de los asistentes a dicho evento”.
SU DOMICILIO ES UNA CASA
Susana Pantoja Luna nació el 23 de agosto de 1983 y registró el 23 de septiembre de 2016 ante el IMPI la marca G.S.E. K9 junto con el logotipo que utiliza en sus vehículos de vigilancia. La marca tiene una vigencia hasta el 23 de septiembre de 2026, registrando como dirección el domicilio de su casa donde vive en compañía de su hermana y su madre, en la ciudad de Querétaro.
La casa que esta empresa tiene registrada como oficinas.
La empresa de Susana siempre careció de la infraestructura necesaria para prestar los servicios de seguridad para eventos masivos que debía atender. Se caracterizaba por publicar en su página de Facebook las convocatorias para contratar guardias de seguridad en los juegos de futbol días antes de que se realizara el partido. El mismo día del evento citaba en las propias instalaciones del estadio y ofrecía una contraprestación de 300 pesos.
Este método de trabajo tenía que ser conocido por las autoridades estatales que se encargaban de su supervisión, ya que una simple compulsa de los efectivos requeridos y presentados ante el IMSS presentaría las inconsistencias que impedirían que continuara prestando sus servicios.
No sólo eso: también el uniforme y calzado no era portado de manera general por los trabajadores, ya que no prestaban sus servicios de manera permanente en la organización.
Los vehículos que esta empresa presumía en sus redes sociales no se encontraban rotulados de manera uniforme, estos dos últimos detalles se encuentran definidos en la normatividad respectiva.
@salamillab