“El legislativo legisla y el Ejecutivo ejecuta”. Así se entregan ahora los recursos para festivales culturales

De 101 festivales culturales elegidos por la Secretaría de Cultura para recibir apoyos económicos, 65 aún están en espera de los recursos prometidos. La dependencia federal aún no reparte el 56% de los 110 millones de pesos asignados al Programa de Apoyo a Festivales Culturales y Artísticos de 2019. 

Pablo Raphael de la Madrid, director general de Promoción y Festivales Culturales de la Secretaría de Cultura, dijo en entrevista con EMEEQUIS que los recursos se están entregando de acuerdo a la fecha en que los festivales se llevarán a cabo, esto pese a que los resultados de la convocatoria fueron publicados hace cuatro meses, el 4 de junio pasado.

Por ejemplo, hasta el 23 de septiembre, Documental Ambulante todavía no había recibido los 5 millones asignados para el festival que lleva realizándose desde agosto en diversos estados de la República para proyectar nueve largometrajes y tres programas de cortometrajes, según confirmó su directora comercial, Roxana Alejo; una situación similar a la que vivió el Guanajuato International Film Festival (GIFF) que, pese a haber realizado el evento en julio pasado, dos meses después aún estaba a la espera del presupuesto federal, contó a EMEEQUIS vía correo electrónico Margarita Ortega. 

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La crítica de las asociaciones civiles a esta medida va enfocada al tiempo que tardan en recibir los recursos que usan para poder organizar los eventos, además de tener que apoyarse en un gobierno estatal o municipal para ser acreedor a un apoyo económico. 

Pero Pablo Raphael es claro: “Tenemos que entender que hay que fortalecer el federalismo y al gobierno estatal y municipal”. Aún con ello, asegura, “respetamos la autonomía de las asociaciones civiles”. 

FESTEJOS DE DÍA DE MUERTOS SIGUEN EN ESPERA

EMEEQUIS realizó un cruce entre una base de datos que le otorgó la oficina de Raphael de la Madrid y la creada a partir de los resultados a la convocatoria, así pudo definir que de los 65 proyectos que aún esperan que se entregue el recurso, 12 no fueron seleccionados en la sesión de la Comisión de Dictaminación del 3 de junio pasado, sino que, a decir de Raphael de la Madrid, se fueron sumando posteriormente. La cantidad que estos recursos recibirán no está incluida. En esta lista están, entre otros, Festival de la Catrina más Alta del Mundo, récord Guinness de Jalisco; el Riviera Maya Jazz Festival (Quintana Roo), Festival de Día de Muertos Guamúchil (Sinaloa) y Tradiciones Navideñas en Nopala (Hidalgo).

El resto de los recursos que están a la espera de ser entregados, suman 61 millones 22 mil pesos y corresponden a 53 proyectos que fueron seleccionados durante la convocatoria. El retraso en la entrega, afirma, tiene que ver con que la fecha de inauguración de los festivales que está programada para los últimos tres meses del año. 

Entre los proyectos que aún están a la espera aparecen el Festival Cultural Sinaloa (5.1 mdp), el Festival Internacional de Cine de los Cabos (5.1 mdp), Otoño Cultural (3.4 mdp) y DocsMX (3.4 mdp). 

Raphael aseguró que están trabajando de la mano con las asociaciones civiles para mejorar los mecanismos de entrega de recurso y que más proyectos pueda ser acreedores a apoyos del gobierno federal. Una de las promesas es que el 16 de diciembre de este año, un día después de que se publique el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2020, liberarán las reglas de operación de programas que apoyan a la cultura como el ProFest. 

“Hemos estado trabajando en la adecuación de reglas de operación para la siguiente convocatoria, que los recursos bajen a tiempo y que participen festivales los primeros meses del año que quedaban fuera de convocatoria”, enfatizó. 

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Según dice, este cambio permitirá que eventos como el Festival Internacional de Cine de Guadalajara, que lidera Raúl Padilla Flores, el más beneficiado en la administración pasada con 80 millones de pesos en seis años, puedan participar. Padilla también está a la espera de la recepción de 5 millones 100 mil pesos que obtuvo de la nueva administración para la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. 

LA SECRETARÍA DE CULTURA LLEVA MANO SOBRE LOS RECURSOS

Pablo Raphael de la Madrid asegura que “la Cámara de Diputados tenía un sistema de calificación (de proyectos culturales) laxo y que se prestaba a corrupción”. Habla de cómo 500 millones de pesos cambiaron de manos. 

La Secretaría de Cultura tiene anualmente 500 millones de pesos asignados para apoyar proyectos culturales, sin embargo, en las viejas administraciones, solían ser los legisladores quienes definían quién sí y quién no recibía donativos, Cultura sólo palomeaba la decisión de la Cámara. La declaración de Raphael va en relación a esto, pues este año la dependencia federal decidió ignorar la decisión de la Cámara y poner sobre la mesa sus propias reglas del uso de esos recursos. 

“La decisión, siendo un etiquetado del Ejecutivo, fue atraer esos recursos y generar reglas claras, transparentes y oportunas, para seguir desarrollando festivales culturales que son mecanismos para el desarrollo del país”, afirma Pablo Raphael.

Esta resolución atrajo para el área en la que él ejerce, 110 millones de pesos para la realización de festivales de danza, música, teatro, cine y gastronomía. Una bolsa 80 por ciento mayor a la que se destinaba en la administración pasada para el Programa de apoyo a festivales culturales y artísticos (ProFest). El resto 390 millones de pesos, se repartió en los otros programas de apoyo a la cultura que emanan de la dependencia federal. 

“En esta administración, cuando se atraen los recursos, la Cámara opina, pero ya hay una separación: el poder legislativo legisla y el ejecutivo ejecuta sus recursos”, dice el funcionario. 

El cambio provocó que Alejandra Frausto, titular de la dependencia federal, fuera citada a comparecer en agosto pasado. “Somos parte de un gobierno que dice no a la corrupción”, dijo ante la Cámara de Diputados.

ANTES LOS APOYOS ERAN PARA UNOS CUANTOS

Como lo reportó EMEEQUIS, en la administración de Enrique Peña Nieto, los apoyos económicos por medio de donativos no llegaron para todos y la bolsa mayor de recursos terminó en manos de unos cuantos, al menos en la industria del cine y lo competente a museos, personas cercanas a funcionarios públicos. 

De la lista de beneficiarios, sobresalen personajes como Marinela Servitje, heredera del imperio Bimbo, que obtuvo 102 millones de pesos para crear un nuevo Museo del Papalote; Raúl Padilla López, quien aspiraba a ser Secretario de Cultura, 80 millones de pesos sólo para uno de sus dos festivales; Alejandro Ramírez Magaña, detrás de Cinépolis, 66 millones para el Festival de Cine de Morelia. 

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En la Cámara hubo cuestionamientos a la secretaria de Cultura sobre el destino de los recursos. La diputada Abril Alcalá, del PRD, preguntó sobre el criterio utilizado para distribuir los 500 millones de pesos que antes se definían desde la Comisión de Cultura y Cinematografía y pidió que se les considere en la toma de decisiones. Ricardo de la Peña, legislador del Partido Encuentro Social (PES), criticó el cambio de reglas y acusó que esto dejó a muchas asociaciones y creadores fuera. “¿Qué hará la dependencia para evitar esta situación”, cuestionó. 

Pablo Raphael responde ante los cuestionamientos así: “Estamos haciendo que la oferta cultural sea más amplia, los derechos de la comunidad cultural están garantizados”. Según dice, la misión de la nueva administración es “construir una visión más incluyente, que la cultura tenga en su corazón a la comunidad cultural”. 

@AleCrail