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4T llamando al INE: indagan corrupción en el entorno de Lorenzo Córdova
Un día después del banderazo a “la madre de todas las elecciones”, Bogart Montiel, hombre de confianza del consejero presidente del INE, fue vinculado a proceso junto con tres funcionarios más. ¿Quiénes son los acusados y los acusadores?
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EMEEQUIS.– La sombra de corrupción llegó al INE en el momento más crítico. La institución garante de la democracia en México y su presidente, Lorenzo Córdova, tienen todos los reflectores apuntándoles, debido a la decisión que tomaron de negar el registro como partido a México Libre y el clima electoral rumbo a 2021.
Justo un día después de dar el banderazo para el proceso electoral más grande de la historia, se hizo pública una noticia que cayó como balde de agua en Córdova y allegados: la Fiscalía Anticorrupción, a cargo de María de la Luz Mijangos, logró que se vinculara a proceso al hombre de su confianza en los asuntos administrativos del Instituto, junto con tres colaboradores más, relacionados con el dinero que maneja el INE.
Se trata de Bogart Cristóbal Montiel Reyna, director ejecutivo de Administración; Miguel Ángel Romero Castillo, subdirector de Servicios; José Carlos Ayluardo Yeo, director de Recursos Materiales y Servicios, y Alejandro Mauricio Mateos Fernández, subdirector de Adquisiciones.
Esto por su probable responsabilidad en el delito de uso indebido de atribuciones y facultades previsto en el Artículo 217, Fracción I, Inciso D, del Código Penal Federal.
Jesús George Zamora, titular del Órgano Interno de Control del INE, promovió la denuncia, luego de haber detectado irregularidades en una licitación pública por 105 millones de pesos, de los cuales únicamente se entregaron 15 millones y luego el contrato se anuló por inconsistencias. Eso ocurrió hace un año.
¿CUÁL ES EL MENSAJE?
En el INE se preguntan cuál es el mensaje. Antes de convertirse en contralor, Jesús George Zamora trabajaba en la oficina del consejero José Roberto Ruiz Saldaña, identificado con Morena, contrario a las posturas de Córdova y su círculo.
Está en desacuerdo con la forma de conducir el Instituto, en la resistencia mostrada con respecto a las medidas de austeridad y en general con las posturas que hacen sentir dentro del órgano electoral que sólo las decisiones del consejero presidente se imponen. La Junta General Ejecutiva, que agrupa a todos los directores de las áreas neurálgicas es considerada refugio de “gente” de Córdova y de su secretario ejecutivo, Edmundo Jacobo, quien los encabeza.
Bogart Montiel Reyna se incorporó a esa posición hace casi seis años. Coincidió con la fiscal Mijangos cuando ella laboraba en el INE como coordinadora de asesores del entonces consejero Benito Nacif.
Bogart no ha sido un funcionario discreto y siempre contó con el respaldo de su jefe, el presidente del Consejo General.
El funcionario responsable del aérea administrativa llegó bien recomendado bajo el cobijo del los llamados “Woldies”, es decir, del grupo del expresidente del IFE, José Woldenberg, con quien colaboró el propio Lorenzo Córdova como asesor. Bogart Montiel Reyna fue director de Programación, Organización y Presupuesto en la Secretaría de Salud durante la gestión de Salomón Chertorivski.
En su momento, la mancuerna Córdova-Murayama se convenció de que era el hombre indicado para asumir ese cargo. Los dos consejeros desde 2014 buscaron que la Junta General Ejecutiva tuviera gente afín a ellos y, en realidad, sólo necesitaban el aval del entonces consejero identificado con el PRI, Marco Baños.
“Revolucionará al INE”, argumentaba Córdova para convencer a los demás consejeros de que su propuesta debía ser votada en el Consejo General.
El nombramiento obtuvo mayoría de nueve votos, pues los consejeros Pamela San Martín y Javier Santiago le negaron su respaldo. Ambos se inconformaron porque Córdova no los había tomado en cuenta para la decisión. Únicamente buscó los ocho votos que prevé la ley para este tipo de designaciones.
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Apenas a meses de llegar al INE, Montiel decidió cambiar las camionetas de los directores ejecutivos, incluida la de él, por supuesto. El plan era que después de las Jeep Cherokee de los directores, llegaran las Dodge Durango para los consejeros, sin embargo, el primer día que desfilaron las nuevas Jeep en las instalaciones de viaducto Tlalpan y Periférico, llamaron la atención de fotógrafos de los medios. Ante eso las Durango quedaron solo en planes.
Cuando se dio el malogrado proyecto de la nueva sede del INE, que representaba la construcción de dos torres gemelas en Viaducto Tlalpan, Montiel pregonaba que “su proyecto” haría historia en la democracia mexicana.
El día que presentaron el concurso de proyectos de la nueva sede del INE, a Bogart Montiel se le ocurrió, junto con la Dirección de Comunicación Social del Instituto, poner las maquetas de los nueve proyectos a la entrada de la sede electoral. Fotógrafos y reporteros no tardaron en consignar que había proyectos con canchas de futbol, ciclopistas y huertos. La reacción del círculo rojo no se hizo esperar y el proyecto fue bautizado como INElandia.
Más adelante, los gasolinazos de inicio de 2017 y la presión de los medios, hicieron que los consejeros recularan en su intención de constituir las también llamadas torres gemelas del INE.
Bogart siempre ha sido apapachado por Córdova, Ciro Murayama y Edmundo Jacobo. Llamó mucho la atención cómo frente a la construcción del presupuesto de 2018, el encargado de la administración del INE hacía carrusel de medios promoviendo su libro, Innovación pública que, por cierto, fue presentado por Córdova y su exjefe, Salomón Chertorivski. Mientras calaban los cuestionamientos por el presupuesto solicitado por el árbitro comicial, Montiel concedía entrevistas en sus oficinas ubicadas en Periférico Sur a reporteros de radio.
Incluso llegó a tener una entrevista de semblanza en un suplemento dominical de un diario de circulación nacional. Claro, del presupuesto jamás dio entrevista alguna, el tema fue solamente el libro.
Los mensajes en medios al promover el texto tenían colmo hilo conductor el lema de inclusión #soy thinkie, que según fuentes del INE era motivo de burla incluso de algunos Consejeros electorales. Memes y chistes sobre el administrador del Instituto inundaron los chats del personal en todos los niveles.
El colmo de los excesos fue que, aprovechando la alta afluencia de la macro sala de prensa que colocó el INE para la elección presidencial de 2018, promovió con recursos públicos su “lema creativo” #SoyThinkie, con artículos promocionales (lápices, gomas, botones y porta gafetes).
Por el stand de Bogart pasaron la mayoría de los consejeros, sin faltar el consejero presidente Córdova Vianello. Las fotografías con la campaña personal del director administrativo del INE fueron promocionadas en el correo institucional de todo del personal del órgano electoral.
“Con Bogart nadie puede”, era la frase de algunos consejeros. Sin embargo, todo indica que quienes sí pudieron fueron el titular del Órgano Interno de Control y la Fiscalía General de la República.
SE DIERON POR ENTERADOS
Pero eso sí, el área de Comunicación Social difundió un boletín en el que se da por informado del proceso abierto en contra de los cuatro funcionarios, pero con la aclaración de que no serían separados de sus cargos:
“La Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción –ante la que el OIC interpuso la acción–, pidió la suspensión de los cuatro funcionarios; el juez no la concedió y otorgó un plazo de seis meses para verificar si las imputaciones tienen lugar. Mientras tanto, priva la presunción de inocencia de los funcionarios como el mismo juez lo señaló en la audiencia.”
El consejero Ruiz Saldaña reviro en sus redes sociales: “La sociedad mexicana merece una explicación más amplia que ese Comunicado de quienes manejan Comunicación Social del @INEMexico. Sin demérito de su presunción de inocencia, hago un llamado a las personas involucradas que atiendan su asunto penal separándose temporalmente del INE.”
Si el Consejo General se decide a relevar a Bogart, va a necesitar un perfil que reúna al menos el aval de 8 de los 11 consejeros. Mayoría calificada, como lo exige la ley, en pleno inicio del proceso electoral rumbo al 2021.
Y cuando el Presidente de la Republica advierte que en sus acciones de combate a la corrupción no va dar ni un paso atrás, el árbitro electoral se coloca en el ojo del huracán.
@emeequis